13/9/10

12. cisma y desaciertos


En azul la narración de Kasey
En turquesa la narración de Aselai
________________________________________________________________________________


Cisma y desaciertos

Casi me sentí alegre cuando me di cuenta que llorabas nuevamente después de largos días de silencio pero nada era intencional desde que parecías no estar ahí dentro, no te dabas cuenta de tus lágrimas, fue difícil respirar cuando supe lo que eso significaba, sin embargo no pude más que entenderte, querías dejarme y no sabías cómo. No tengo nada de ti ahora, más que esta consideración dolorosa. Durante este vivir callado comencé a extrañarte y a dejar de quererme mientras te amaba cada día más y más te necesitaba de vuelta, perdí la confianza y no te reproché nada. Quería retenerte en mis brazos, hacer que me amaras otra vez, pero esa noche lloraste y yo lloré contigo todo lo que tenía guardado, tu consuelo me supo a lástima. No pude soportarlo, corrí haciéndote fácil el dejarme. Me aparté de ti como querías, ahora… me arrepiento tanto.

¿Algún día dejaré de tener miedo?
Sólo si dejamos de amarnos.
Entonces jamás dejaré de tener miedo.
Entonces viviremos con eso.
¿No te importa?
Te amo demasiado.
¿Por qué dejé que me superara el mundo?
¿Por qué olvidamos nuestras propias palabras?
Hazme superar el miedo sin dejar de amarte.
Di que me amas fuera de nuestra habitación,
luego vuelve a mí y me lo dices en secreto.
Porque así es como quiero que sea,
secreto porque es privado y no prohibido.
¿Sabes de qué color son mis ojos As?
No, no lo sabes.

Me parece ahora que estamos lejos, que cada vez que me hablabas de mis ojos esperabas que te hablara de los tuyos, que las evasivas de después no eran un reproche por no poder contestar a tu muda espera sobre cómo eran para mí los tuyos, sino que jamás te preguntara como eran, ahora sé que tú podías contármelo, siempre quise saberlo y nunca supe que tu ansiabas que yo lo supiera gracias a ti. Era tan simple.

Nos equivocamos, ahora ¿Podemos perdonarnos?
Podríamos tratar de explicarlo todo pero ¿Qué caso tiene?

El invierno pareció más triste para todas.
¿Cómo podía acabarse lo que era para siempre?
Lirios, jóvenes soñadoras, pobres princesitas, vieron como la maestra de segundo entraba a la habitación de Aselaí esa mañana y salía con una bolsa llena de cabellos rojos, cabizbaja. Kasey y Aselaí se cruzaban cada tanto en algún pasillo y nada cómplice ocurría entre ellas, nada que todos vieran e hicieran como que nunca fue así. Kasey pasaba el tiempo libre en la biblioteca, más delgada, más callada, más ausente. Aselaí sola en su habitación, sin su larga cabellera roja, sin el brillo en la mirada, sin sonrisa. El fin de ese año llegó lento y angustiante. La graduación.
¿Ellas jamás se volverían a sentir?

Me fui cuando fue tiempo de irse, sin despedirme, no vacilé, no sentí pena, estaba tan vacía y me fue imposible llorar ese día, al siguiente no quise despertar jamás. No dejé nunca de ver el rojo en las sábanas, separado de ti, separándome de ti. Cortaste el fuego con el frío filo de la navaja.

Dejarnos, jamás quise dejarnos. Pero ¿Cómo culparte?


3 Comentario(s):

Unknown dijo...

O.o quiero leer mas pero no pediré mas por que se que no vendrá mas en un tiempo.

Que bueno que te animaste a digitalizar, tenia ganas de seguir leyendo esto.

Unknown dijo...

omg,te demoraste en seguirla,y se va poniendo cada vez mas triste T.T,me tinca que va a terminar peor...



me alegra que hayas seguido con la historia,pense que ya la habias dejado botada :p

Anónimo dijo...

no hubo equivocaciones, sino desaciertos muy dolorosos...nuestra vida se separa, así mismo los lirios mueren cada año... que doloroso suponer que puede ser la última...
lo único que me causa desasosiego, es el tema de los ojos...pero bueno, solo cabe esperar.
muchísima suerte, espero seguir leyéndote.
Tu verdadero Anónimo

 
 
Copyright © maldita ilusa
Blogger Theme by BloggerThemes Design by Diovo.com